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Seguramente uno de los veteranos más valorados de la NBA por su saber hacer, su cordura a la hora de tomar decisiones, su excelencia física a pesar de su edad, y su gran carácter. Richard Jefferson ha decidido poner fin a su carrera en la NBA a los 38 años, dejando como su último equipo a los Denver Nuggets, un anillo de campeón logrado junto a LeBron en 2016 con los Cavs, y una aventura de 17 años al máximo nivel que le ha hecho jugar con Nets, Bucks, Mavericks, San Antonio, Warriors y Utah además de las dos franquicias ya citadas.
Llegado a la NBA en 2001 procedente de la Universidad de Arizona, fue seleccionado en el puesto número 13 por los Rockets, pero traspasado inmediatamente a los New Jersey Nets. Allí sería testigo y parte de la mejor etapa de la franquicia ahora sita en Brooklyn, eludiendo sus dos títulos logrados en la ABA con Dr. J al mando.
Los Nets, un equipo históricamente perdedor, atravesaban el cambio de milenio bajo un base con nombre propio: Stephon Marbury era la estrella de aquel equipo, que sería traspasada a Phoenix a cambio de otro base que lo cambió todo, Jason Kidd.
Con Kidd, el sophomore Keyon Martin, el rookie Jefferson, Todd MacCulloch, Keith Van Horn y Kerry Kittles, los Nets pasaron en un solo año de no pisar a Playoffs a situarse en las Finales de la NBA, en una de las irrupciones más importantes que se recuerdan.
Los eternos subcampeones: New Jersey Nets
Allí cayeron contra los Lakers de Kobe y Shaq, y el año siguiente también contra los Spurs. El equipo que había revolucionado el Este, quedó para siempre marcado por no haber conseguido lograr el anillo en una de estas dos intentonas, pero su historia no acabó allí.
Tras las salidas de Kittles y Martin, los Nets consiguieron hacerse con los servicios de un Vince Carter que había pedido a los Raptors ser traspasado (sí, hizo un Jimmy Butler de la época), llegando al equipo en 2004.
El trío Kidd-Jefferson-Carter hizo que los Nets siguieran en los puesto de arriba del Este durante unos cuantos años más, aunque sin llegar a rozar la cima como lograron antes. Las lesiones acabaron ocasionando la salida de Jefferson primero a Milwaukee, de Carter a Orlando y por último de Jason Kidd a Dallas en 2008, equipo donde acabaría logrando su anillo.
Quizá para seguidores jóvenes que se hayan sumado en la NBA en los últimos años Jefferson haya pasado siempre como un gregario entregado, pero el alero que ahora anuncia su retirada estuvo en las quinielas para All-Star (y seguramente se lo mereció) durante varias temporadas. En su mejor curso promedió 22 puntos, 3 asistencias y 4 rebotes por partido. Y eso en un equipo donde cabe recordar, estaban Kidd y Carter.
Los Nets comenzaron un par de años después su plan de relocalización en Brooklyn, que han dado a la franquicia su equipación, ubicación y logo actual, sin conseguir todavía reverdecer ni de lejos los logros conseguidos en su anterior sede.
Jefferson se retira con su anillo conseguido (algo que por ahora no ha logrado Carter) y un cartel menor de lo que fue un jugador dominador en su posición durante algunos años en ataque y defensa. Con su retirada, se sigue cerrando una etapa en la NBA que sirvió de transición entre la era pos-Jordan y la llegada de LeBron, una época con la que muchos crecimos y que guarda sus pequeñas grandes joyas en equipos como el que fueron este New Jersey Nets.