Miami Heat forzó el séptimo y definitivo partido de las Finales de la NBA tras vencer en la prórroga por a los San Antonio Spurs después de ir perdiendo durante buena parte del encuentro. Sin embargo, el buen hacer de James y Allen en los instantes finales del tiempo reglamentario permitió a los Heat tener otra oportunidad en la prórroga, la cual no desperdiciaron.
A falta de poco más de 20 segundos para el final del último cuarto, San Antonio ganaba por 94-89. Sin embargo, un triple de LeBron James reducía la diferencia a dos puntos. Leonard recibía una falta, pudiendo anotar solamente uno de los dos tiros. Un enorme rebote de ataque de Bosh permitía a Ray Allen empatar con un triplazo el partido y mandarlo a la prórroga.
La polémica
En el tiempo extra, Miami tuvo más oficio, siendo capaz de llegar al último minuto un punto arriba (100-101). En los últimos segundos, no fue pitada una posible falta de Allen a Ginobili en la penetración del argentino, terminando con prácticamente todas las opciones del conjunto texano. Sin embargo, San Antonio tuvo una última oportunidad, perdiendo 100-103 y con 1.9 segundos por jugar. Danny Green fue capaz de recibir más allá del triple, pero Chris Bosh estuvo atento para taponar y mandar la eliminatoria al séptimo y definitivo encuentro.
LeBron James otra vez estuvo excelso, contestando así a las sempiternas críticas que recibe año sí, año también, con 32 puntos, 10 rebotes y 11 asistencias. El MVP de la temporada regular es el cuarto jugador en alcanzar los 30 puntos, 10 rebotes y 10 asistencias en un partido de la final tras Charles Barkley, James Worthy y Jerry West. Además, los 20 puntos de Chalmers, y los 5 triples convertidos entre Mike Miller y Shane Battier fueron clave en la victoria local.
Por los San Antonio Spurs, Tim Duncan volvió a ser el mejor con 30 puntos y 17 rebotes. Se acaban los calificativos para el mejor ala-pívot de la historia. Kawhi Leonard también tuvo buenos minutos, con 22 puntos y 11 rebotes. En del debe de San Antonio hay que señalar a Danny Green, Ginobili y Parker. El primero, quizá el mejor jugador de los de Popovich en las finales, no pasó de 3 puntos y 1-7 en tiros de campo. El escolta argentino, por su parte, terminó con 8 pérdidas, mientras que Parker, a pesar de sus 19 puntos, tuvo muy malos porcentajes (6-23 en TC).
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