Los favoritos siguen su camino: Un repaso a la Sweet 16

Comienza lo bueno de la competición más emocionante que puede vivir un aficionado al baloncesto. Ya sólo quedan 16 y hasta ahora han pasado muchas cosas en el torneo que jóvenes amateur que recorre Estados Unidos y tiene pendiente a prácticamente todo el globo.

Los grandes favoritos (Florida y Arizona) caminan con destreza en su senda a la gloria. Los Gators, apenas sin despeinarse, han barrido en las dos primeras rondas, Pittsburgh Panthers incluídos. Scott Wilbekin está liderando al equipo de seniors de Billy Donovan, con el alero Frazier II como fiel escudero. Wilbekin tiene además el honor de haber sido elegido mejor de la SEC sin liderar a su equipo en anotación. Curiosidad que comparte con su hermano de fraternidad el actual crack de los Houston Rockets Chandler Parsons.

Ahora se enfrentan a UCLA. Un equipo que ha ido de menos a más a lo largo de la temporada y que sorprendió a los Arizona Wildcats en el final la Pac 12, hecho que le valió un billete para el baile de la March Madness con una ‘seed 4’. De los Bruins hay que estar pendientes de Jordan Adams y de Kyle Anderson. Este último, a pesar de haber empezado algo oxidado en la Segunda Ronda, empieza a demostrar el gran jugador que es. Reeditan la final por el título de 2007.

Por su parte, los Wildcats han comenzado de forma fulgurante barriendo a un gran rival como Gonzaga en la Tercera Ronda. En su duelo en la Sweet 16 se enfrentarán a San Diego State, un rival muy a tener en cuenta. Todos los focos puestos en la pareja de Arizona formada por Nick Johnson y el ‘freshman’ Aaron Gordon, uno de los jugadores más atléticos de la competición.

Un clásico

No es el Madrid-Barcelona pero no se queda atrás. La fortuna de la March Madness nos ha regalado un duelo de infarto: Louisville vs Kentucky. Los dos últimos campeones de la NCAA y tan rivales como vecinos se enfrentan en un encuentro que bien podría ser una final. No hay excusas, este es baloncesto del bueno. El ‘freshman’ en estado de gracia Julius Randle frente al carismático base ‘senior’ Russ Smith. Las espadas, están por todo lo alto. La veteranía y Pitino me llevan a apostar por los Cardinals, pero en un partido al K.O. todo es posible.

En el mismo árbol, los Michigan Wolverines, el mejor equipo universitario ofensivamente hablando se medirá a Tennessee. Un rival que se parece mucho al que derrotaron en la ronda anterior (Texas) marcado por un imperioso poder defensivo. Pero los Wolverines no deberían relajarse. Los Volunteers han llegado al baile de los 16 desde la First Four ganando por el camino a Fort Mercer, el verdugo de Duke y a Iowa y Massachusets. Las estrellas de Michigan Glen Robinson III y Nick Stauskas son los cracks a seguir.

Los bases ponen el espectáculo

Si os gustan los bases tanto como a mí, tal vez seréis de identificaros con equipo liderados por ‘jugones’ de tal talla. A mí me ha pasado con DeAndre Kane, de Iowa State y con Shabazz Napier, de Connecticut. Ambos equipos me ponen en un aprieto emocional pero si tengo que elegir me quedo con Iowa St., que también tienen en Melvin Ejim, elegido mejor de su conferencia, a un jugador de muchísima calidad. UConn barrió a Villanova (un equipo algo inflado en los ránkings en mi opinión) y los Cyclones ganaron sobre la bocina a North Carolina en un partido trepidante.

Completa el cuadro el duelo entre Virginia y Michigan State. Los Cavaliers han cerrado muchas bocas, incluida la del que escribe, mantiéndose firmes tras liderar la ACC (la conferencia más dura) y ganar el torneo. Son los únicos supervivientes de su división y tras ganar a un buen rival como Memphis en la Tercera Ronda, ahora se miden a un grande. Los Spartans en los que jugó el mítico Magic Johnson son mis favoritos para llegar a la Final Four. Hay que destacar a Adrien Payne, Denzel Valentine y Brandon Dawson de los verdes.

Duelo de cenicientas

El destino ha querido que las dos mayores sorpresas hasta el momento de la March Madness (con permiso de Baylor) se junten en un partido a vida o muerte. Standford ha sorprendido a propios y a extraños al haber protagonizado una de las barridas del campeonato, eliminando a los todopoderosos Kansas Jayhawks de Andrew Wiggins, si veis mi predicción de la Tercera Ronda, ya os comentaba que el batacazo de Kansas estaba en el aire.

Los problemas de espalda de Joel Embiid le hicieron perderse este encuentro y su equipo no pudo sacar la eliminatoria adelante. El pívot camerunés de 2’13 aún no sabe si se presentará al draft y se reunirá con el equipo técnico de los Jayhawks y con su compatriota Mbah-a-Moute, que milita actualmente en los Timberwolves, para tomar una decisión. Previa a su conquista ante Kansas, Stanford había dado la campanada ante New Mexico.

 

La universidad de Dayton no se ha quedado atrás. Llegaba al campeonato como quinto de conferencia y con una triste seed 11 y en su primer encuentro se cargó el mítico programa de Ohio State. Los siguientes fueron los Syracuse Orange y su impenetrable zona, comandada por el general Jim Boeheim, uno de los grandes favoritos a llegar a la Final Four. El ganador de este inesperado duelo se medirá a los Gators en la Elite Eight.

No eran grandes favoritos pero todo el mundo estaba pendiente de lo que McDermott pudiese hacer por Creighton. Los Buejays quedaron apeados por una fea derrota ante Baylor. Pocos apostaban por esta universidad que, es sí, venía en racha de sus últimos encuentros. Ahora se mediran a los grandes aunque siempre criticados Wisconsin Badgers. Estad muy atentos a su número 44 Frank Kaminsky, si os gustan los altos con buena mano desde el arco de tres puntos.

Después de todo…

No está tan mal mi bracket. En este momento, he acertado 11 de 16. Echadle un vistazo.

Imágenes: Foxsports.com, Marco García, USA TODAY Sports, ELSA, Getty Images.
Javier Marmisa: Journalist, Digital Marketing & Media Pro. // 90's kid
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