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El mundo NBA no olvidará pronto la noche del lunes 29 de Octubre del 2018. No, no porque los Bucks le ganaran la batalla de los invictos a los Raptors. Sino porque, ante unos desamparados Bulls, en Chicago, los Golden State Warriors hicieron historia, nuevamente, de la mano (literal) de Klay Thompson. Yo, por ejemplo, recordaré por siempre dónde estaba cuando Klay rompió el record de triples anotados en un partido, que es justo lo que ha hecho esta noche.
En plena cena familiar, se me ocurrió darle un vistazo rápido a mi teléfono para ver cómo le estaba yendo a los Warriors frente a los Bulls. Abrí mi aplicación predilecta para ver resultados (theScore) y vi el siguiente marcador: 92 a 50. Wow, qué tal esfuerzo defensivo -pensé yo- esos 50 deben ser algún tipo de récord de menor cantidad de puntos permitidos en un partido. ¡Grande fue mi sorpresa al percatarme que el partido estaba recién en el entretiempo! Resulta que el verdadero récord (de franquicia) fueron esos 92 puntos en una mitad. Pero esta hazaña pasó prácticamente desapercibida frente al logro de Klay.
La noche anterior, Golden State había vencido de visita a Brooklyn y un Warrior, Stephen Curry, ya venía con un récord bajo el brazo. En efecto, ante los Nets, Steph se convirtió en el primer jugador en la historia de la NBA en anotar al menos 5 triples en 7 partidos seguidos. Esta noche, le tocó lucirse a Klay Thompson, quien pudo, finalmente, sacudirse de la crisis triplera (5 de 36 intentos en lo que iba de temporada) que lo aquejaba en sus 7 primeros partidos. En Chicago, Klay batió el record de triples anotados en una mitad, con 10, y el de triples anotados en un partido, con 14.
Para los Creyentes en Klay o Klayentes® este tipo de fenómenos no son tan sorpresivos. Recordamos, por ejemplo, el que podría haber sido el partido más eficiente de la historia de la NBA, cuando Klay anotó 60 puntos. Ambos partidos, aquel del 05.12.2016 contra los Kings y el de anoche, son, si no gemelos, por lo menos mellizos. Esos 60 puntos, Klay los consiguió en 29 minutos de juego y con tan solo 11 dribles. Los 52 puntos de anoche llegaron en 27 minutos de juego y 16 dribles. Klay es el rey de catch and shoot.
Klay ha pasado de una serie de 5/36 en triples a firmar el récord de triples conseguidos en un partido (14) y la anotación más alta de lo que va de temporada (52).
De hecho, analizando las 18 canastas de anoche (sin contar 2 tiros libres) pudimos anotar algunas conclusiones que ayudan a explicar su rendimiento.
Las Habilidades de Klay
Todos somos testigos de la precisión de Klay en sus disparos pero no debemos subestimar dos de sus virtudes menos vistosas:
Consideramos que estos son los dos elementos de su juego que lo diferencian de cualquier otro francotirador y que lo ponen al mismo nivel histórico que Reggie Miller, Ray Allen o incluso, su compañero de equipo, Steph Curry.
Gracias a estas dos habilidades, Klay no necesita tener el balón en sus manos durante mucho tiempo para anotar. De hecho, en los últimos 5 años, Klay siempre estuvo en el Top 3 de la liga en puntos por toque de balón, entre jugadores que hayan participado en por lo menos 70 partidos.
Los que juegan basket saben que es sumamente difícil meterse en el ritmo del juego si no se tiene el balón en las manos y es esa habilidad de Klay, de rendir sin dominar la posesión de balón, lo que lo hace tan especial.
El sistema de los Warriors
El sistema de los Warriors calza a la perfección con las habilidades de Klay que acabamos de describir. Es sabido que la táctica de Kerr puede ser mejor descrita como una oda al movimiento de balón, pero una cosa es rotar el balón y otra cosa es mover el balón con un propósito y, en este caso, ese propósito es entregar el balón al jugador que tenga la mejor opción de anotar. Frente a los Bulls, los Warriors le pasaron el balón a Klay en la mejor posición posible para anotar, lo cual explica que solo haya tenido que tomar 16 dribles para lograr sus 52 puntos. Más aún, específicamente en sus 14 triples, Klay solo necesitó 10 dribles; en 10 de dichos triples solo tuvo que recibir y disparar (cero dribles), en 3 de ellos solo usó un drible para acomodarse o evadir al defensa. El que le malogró la estadística de los dribles fue un triple que tomó luego de ir de costa a costa después de haber asegurado un rebote defensivo (6 dribles).
Los siguientes jugadores deben agradecerle a Klay por haberles sumado asistencias fáciles a sus estadísticas: Draymond Green (7 de sus 11 asistencias fueron a Klay), Steph Curry (sus 6 asistencias fueron a Klay), Kevin Durant (2 de sus 8 asistencias fueron a Klay).
La defensa de los Bulls
Habiéndole dado su merecido respeto y reconocimiento a las habilidades personales de Klay y al sistema ofensivo de los Warriors, no podemos dejar de evidenciar las falencias defensivas de los Bulls que facilitaron esta hazaña. En particular, debemos señalar a Zach LaVine como el principal culpable de la debacle. Repasando el vídeo podemos constatar que el 8 de los Bulls es víctima directa de 5 de los triples de Klay, en otros 4 de los triples su pasividad ante los movimientos de cortina de los Warrios expone a sus compañeros, en particular Justin Holiday. A final de cuentas, la estadística dictará que 17 de los puntos de Klay le fueron anotados a LaVine, 12 a Holiday, 5 a Payne, 5 a Hutchinson y 3 a Jabari Parker y Arcidiacono, cada uno. Pero el video mostrará que LaVine es responsable de, por lo menos, unos 30 puntos de Klay Thompson.
Zach LaVine ya venía precedido de una reputación defensiva cuestionable y será necesario tomar esto en cuenta en la narrativa que lo venía considerando como un potencial All-Star este año.
Klay Thompson, agente libre en 2019
Todo esto llega, como decimos, después de que Klay comenzara de forma irregular la temporada. Una temporada en la que se juega mucho, ya que será agente libre el próximo verano junto con Kevin Durant. Hasta la fecha, se ha hablado mucho del posible destino del alero y poco del escolta, sobre quien basculan algunas opiniones que lo sitúan como un jugador accesorio y que solo es capaz de brillar a este nivel en el organigrama de los Warriors. Veremos, si en el discurso de la temporada, qué peso acaban teniendo estas sensaciones. Si el jugador se siente cómodo a la hora de renovar a la baja, o decide probar fortuna en otros contenders necesitados de tiradores de nivel supremo. PD: Klay Thompson es de Los Ángeles.
Fue una noche verdaderamente mágica para Klay Thompson y sumamente entretenida para todos los fans de los Warriors. Pero lo más emocionante fue apreciar la alegría genuina que brotaba de todos sus compañeros de equipo, en particular Curry. Consideren lo siguiente: el rol protagónico que fue tomando la hazaña de Klay hizo que Curry no pudiera extender el récord de más partidos seguidos con por lo menos 5 triples. Más aún, adivinen a quien superó Klay como jugador con más triples en un partido. Así es, el poseedor del récord anterior de 13 triples en un partido era Curry. Sin embargo, Curry no solo le da la asistencia para su triple 13 del partido, sino que le pone la cortina para el triple número 14.
Ante los reporteros, después del partido, Curry tuvo las siguientes palabras: “Los récords están hecho para romperse, yo solo estoy contento de que haya sido mi compañero de equipo y nadie más y además pude ser testigo de ello en persona”.
No todos son Klayentes® pero todos somos testigos.