Solo él podía hacerlo. LeBron James consiguió con un triple sobre la última décima dar la victoria a los Miami Heat en la cancha de Golden State Warrios, y lo logró justo después de que Stephen Curry diera por prácticamente finiquitado el partido gracias a un 2+1.
Al final del partido -con resultado de 111-110– James había logrado una nueva exhibición quedándose muy cerca del triple-doble merced a sus 36 puntos, 13 rebotes, nueve asistencias y dos recuperaciones de balón para ser de nuevo el líder de los Heat, donde no pudo jugar Wade.
Con esta victoria los de Miami se colocan a dos partidos y medio de los Pacers, que cayeron ante Dallas, en la lucha por la mejor marca de la Conferencia Este.
Por parte de los Warrios, Stephen Curry fue el líder del equipo al conseguir 29 tantos, siete asistencias y cinco rebotes, aunque con cinco perdidas de balón. Los de Oakland suman con esta su quinta derrota en 10 partidos y ya solo son octavos en el complicado Oeste, dando la razón a los que dicen que el equipo de la bahía de San Francisco está rindiendo por debajo de sus posibilidades.