El nuevo formato del All-Star 2018 había creado expectación. Y no era para menos. Se ponía fin al habitual formato de Conferencias para apostar por equipos con jugadores mezclados, capitaneados por LeBron James y Stephen Curry, los jugadores más votados. Este domingo en Los Ángeles, el nuevo formato dio la razón a toda esa expectación, un partido competido, con defensa, piques y espectáculo. Algo que no veíamos desde hace demasiado tiempo, quizá, desde que en 2003 viéramos el último All-Star de Michael Jordan, cargado de morbo por su enfrentamiento con Kobe Bryant.
Pero ayer la apatía habitual del Partido de las Estrellas desapareció. El Team LeBron se impuso 148-145 al Team Stephen y lo hizo gracias a una remontada lograda desde la defensa. Cómo acabó el partido es quizá la mejor muestra de ello. La celebración posterior de LeBron, eufórico, también.
Repetimos, defensa en un All-Star Game. Comparemos con algo que vimos el año pasado:
MVP para el Rey LeBron
LeBron James se llevó el MVP del partido rozando el triple-doble: 29 puntos, 10 rebotes, 8 asistencias. Hacía 10 años que LeBron no destacaba así en un All-Star, desde sus primeros tiempos en Cleveland, donde se llevó dos MVPs del partido.
Destacaron también DeRozan y Lillard con 21 puntos. Stephen Curry, por el contrario, se quedó en solo 11, mientras que sucedió un extraño episodio con Jimmy Butler, que no llegó a salir a la pista, asegurando después que estaba cansado y prefirió reservarse.
El encuentro tuvo además varios alicientes propios de una gran cita: Russell Westbrook y Durant jugando juntos, el reencuentro de Irving y LeBron, o el homenaje de Anthony Davis al lesionado Cousins llevando su camiseta.
Tampoco estuvo mal hasta la presentación de los equipos, realizada por el actor Kevin Hart, que iba lanzando una broma a cada uno de los jugadores. La mejor de todas quizá, recordar que Irving hace lo que quiere en la cancha porque está seguro de que la Tierra es plana.
La NBA ha demostrado que sabe salir de todo más fortalecida. El nuevo formato ha superado con 10 su primer examen y promete crear nuevos enfrentamientos épicos. Y de eso los más beneficiados somos nosotros, los aficionados.