Kevin Garnett ha vuelto a Minnesota ocho temporadas y media después de su partida rumbo Boston en busca de un anillo que, por más que lo intentó, no pudo conseguir para sus lobos. Con 38 años, su rendimiento en la pista ya no es el que era, y difícilmente podrá decidir partidos con una gran actuación o con una canasta ganadora. Pero su intensidad y carácter siguen intactos, y eso sí ha tenido un impacto inmediato tanto en el equipo como en la afición de Minnesota.
En agradecimiento a la gran acogida que le brindaron en su vuelta al equipo, Garnett ha querido tener un detalle con la afición comprando 1.000 entradas para el próximo partido de los Timberwolves en casa, esta misma madrugada frente a los Clippers. Las entradas, cortesía del 15 veces All Star están disponibles en la web del equipo. Los 500 primeros aficionados que se hagan con ellas tendrán dos asientos gratis en la grada del Target Center.
Con este gesto, Garnett, además de lanzar un guiño a la afición, echa un cable a la que posiblemente sea su franquicia en el futuro, ya que antes de su vuelta, Minnesota ocupaba el último lugar en cuanto a asistencia de público al estadio.
View Comments (0)