La NBA ha hecho oficial este martes el nombramiento del alero de los Oklahoma City Thunder Kevin Durant como MVP de la temporada regular 2013/2014. Se trata de un nombramiento que no por ser esperado deja de ser meritorio, puesto que los números que ha promediado este curso son de escándalo: 32 puntos, 7.4 rebotes y 5.5 asistencias por encuentro, haciendo además historia al superar a Michael Jordan en número de partidos consecutivos en los que anotó al menos 25 puntos, dejando su marca en 42, por encima de los 41 del actual dueño de los Charlotte Bobcats.
Este galardón tiene más mérito si cabe si se tiene en cuenta que se lo ha llevado superando a LeBron James, quizás el mejor jugador de la NBA en estos momentos y que había conseguido cuatro de los últimos cinco galardones de MVP de la temporada. En las votaciones, el alero de los Thunder se llevó 1.232 puntos (119 de los 125 periodistas que votaron le eligieron en el primero puesto) por los 891 de LeBron James (6 veces votado en primer lugar y 118 en segundo) y los 434 de Blake Griffin (el único que, sin ser ni Durant ni James, fue votado entre las dos primeras posiciones).
El Top-5 lo completan Joakim Noah, que fue premiado con su gran temporada, sobre todo en la faceta defensiva, con 322 puntos, y James Harden, con 85. Por detrás terminaron Stephen Curry (66), Chris Paul (45), Al Jefferson (34), Paul George (43) y LaMarcus Aldridge (26). Como hecho que puede quedar para el anecdotario de la liga, sobre todo durante los próximos meses, Steve Kerr, el probable futuro entrenador de los New York Knicks, no dio ni uno de los cinco votos a Carmelo Anthony, la estrella neoyorkina que podría abandonar el barco este verano en su búsqueda del anillo.
En cuanto a Durant, no deja de ser irónico que justo en el momento en que reciba el galardón su equipo y él se hallen en el que puede ser el peor momento de la temporada, después de eliminar con muchos apuros a Memphis Grizzlies y comenzar la eliminatoria ante Los Angeles Clippers con el peor pie al caer en casa en el primer encuentro. Además, en primera ronda, y gracias en parte a la defensa de Tony Allen, ha visto como sus porcentajes de tiro se reducían considerablemente (de 50,3% en TC en temporada regular a 44,3% en PlayOffs).
Aún así, los méritos de Durant para hacerse con el MVP de esta temporada son incuestionables. No sólo ha sido el jugador más decisivo y determinante, sino que también es el primer jugador desde Allen Iverson en 2001 en ser a la vez el MVP y el máximo anotador de la temporada regular. Sus actuaciones estelares, como esos 42 partidos consecutivos anotando al menos 25 puntos, sus canastas espectaculares como aquel 3+1 contra Memphis hace apenas diez días, sus imposibles crossover… son motivo suficiente como para creer en él como líder de un equipo que ahora mismo está perdido pero que, si sus estrellas vuelven a encontrarse, puede volver a ser el máximo favorito a ganar el anillo. Y todo está en la mano del MVP. De Kevin Durant.