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Quién es Jonathon Simmons y cómo ha pasado de semipro a taponar a Curry en 3 años
El escolta de los Spurs ha sido el protagonista de la primera jornada NBA de esta temporada 2016-2017. Hace tres años jugaba en un equipo llamado ‘Leyendas de la Tierra de Azúcar’. Esta es su historia.
Hace tres años Jonathon Simmons (Houston, 1989) jugaba en un equipo llamado Sugar Land Legends (sí, los Leyendas de la Tierra del Azúcar) de una liga semiprofesional estadounidense de la que seguramente no hayas oído hablar nunca.
Este martes, el la jornada inaugural de la temporada NBA 2016-2017, Simmons estaba haciendo esto a Stephen Curry:
Oh my, @ThaRealJsimms! pic.twitter.com/xGNUxfEKJN
— San Antonio Spurs (@spurs) 26 de octubre de 2016
El escolta, que disputa su segunda temporada con los Spurs, fue determinante en la paliza de los suyos ante los todopoderosos Golden State Warriors. 28 minutos, 20 puntos, 4 rebotes y 3 asistencias. Su caso no sorprende viniendo de donde viene: San Antonio, la tierra que Gregg Popovich ha convertido en un campo de perlas inesperadas. Pero sí por la historia que tiene detrás.
Simmons estuvo hace poco más de dos años a punto de dejar el baloncesto. La liga semipro en la que jugaba (cuya web aún sigue activa y te da una idea de lo que era) se terminó a mitad de temporada por el impago de varias de sus franquicias. Simmons estaba en la calle, con un oficio como peluquero de segunda opción, y dos niñas y su madre, LaTonya, a su cargo.
Hasta llegar hasta aquí la de Simmons era otra historia más de un chico con aptitudes para el basket. Como tantos otros. Tras recorrer tres universidades y culminar esta etapa en los Cougars de Houston, donde incluso consiguió algún galardón como jugador de la semana, no fue drafteado por ningún equipo NBA.
Le tocaba tomar una decisión. «El baloncesto era duro y me era más rentable tener un trabajo de lunes a viernes», contaba en una entrevista a la web de los Spurs el pasado verano. Puede que tuviera razón ya que Simmons estuvo cerca de ser otro de los miles de jóvenes de familias no muy bien posicionadas a las que, en un momento dado, les tocó elegir entre un oficio o seguir persiguiendo su sueño de canastas y millones. La suya hubiera sido una decisión sensata. Pero lo intentó una última vez.
En 2013, pidió 150 dólares a su madre para participar en una prueba abierta en los Austin Toros (ahora Austin Spurs) el equipo afiliado de San Antonio en la D-League. Y pasó la prueba.
Allí Simmons disputó una primera temporada sin demasiado protagonismo, pero en la segunda, despuntó promediando 15 puntos por partido y siendo elegido en el tercer equipo defensivo. Lo que vimos el otro día en el primer partido de los suyos esta temporada tiene mucho de eso: un todoterreno capaz de anotar y defender a la vez.
Su buena actuación en la D-League le llevó a levantar el interés de los Nets el verano pasado. Como jugador de Austin apenas cobraba 25.000 dólares al año. Complicado para mantenerse en Estados Unidos apegado a una carrera que no sabes cuánto tiempo puede durar.
El tesón, que era casi lo único que dependía de él, acabó aclarando la ecuación. Simmons se quedó en los Spurs y dirigido por Becky Hammon en la Summer League de Las Vegas del año pasado fue elegido mejor jugador del torneo. Los Spurs, atentos como siempre, no lo duraron más. Le firmaron un contrato no garantizado por dos años por valor de 1,4 millones. Había conseguido su meta.
Como dice su propia madre en la citada entrevista: «Es una de esas historias que ves por la tele. Pero era mi hijo. No me lo podía creer».
Hoy no sabemos si lo de Simmons será sorpresa de la primera jornada o se afianzará como una pieza clave en la rotación de unos Spurs que han comenzado dando muy duro. Su historia merece que sea lo segundo. Algunos ya lo comparan con una versión moderna, y quien sabe si más completa, de Bruce Bowen.
De momento, puedes empezar a apuntarlo para la Fantasy NBA.