Sin Kobe Bryant, sin el prometedor novato Julius Randle, y sin rumbo alguno. Los Lakers parecen haber perdido toda la esencia que les ha hecho ser la franquicia más sonada de la NBA… pero aún pueden ir a peor. Según publica la web TMZ Jack Nicholson, el mítico ganador del Óscar y rostro más representativo de las celebrities que acuden al Staples Center, se está planteando vender su abono.
Los malos resultados de los Lakers -aunque ayer volvieron a ganar en un insulso duelo ante los Celtics que antaño hubiera generado ríos de tinta- podrían haber acabado con la paciencia del actor de ‘El Resplandor’, que lleva siendo un fijo en los asientes a pie de pista desde la década de los 70.
No sabemos hasta que punto será un farol lo del bueno de Jack, porque lo cierto es que de renegar de su asiente le costaría mucho volver a conseguirlo. De hecho, y a pesar de los últimos malos años, los Lakers siguen siendo el equipo con los abonos más caros de toda la liga, y conseguir uno es a día de hoy algo prácticamente imposible, siendo un incluso una herencia familiar muy cotizada.
Veremos si Nicholson cumple con su amenaza, lo que sería otro curioso golpe de efecto a la situación que viven los Lakers, alejados de cualquier opción de gloria inmediata, y cada vez más lejos también de mantener el glamour que siempre ha acompañado a los de Oro y Púrpura.
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