Conociendo realmente quién es Nick Nurse

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La respuesta corta a la pregunta quién es Nick Nurse es, desde esta temporada, es el nuevo entrenador en jefe de los Toronto Raptors.

La respuesta mediana es que Nick Nurse, sucesor de Dwane Casey en la dirección técnica de los Toronto Raptors a partir de esta temporada, es el principal artífice de la reingeniería que elevó la ofensiva de los Raptors hasta el segundo lugar de la liga, en cuanto a rating ofensivo, el año pasado.

Pero lo que nos interesa conocer es la respuesta larga. Dicen que mucho se puede saber de una persona a través de las películas que ve, de la música que escucha o de los libros que lee. Y nosotros hemos querido conocer la fascinante historia de este obsesivo de la eficiencia a través de su libro preferido: El Viejo y el Mar.

En esta obra maestra de Ernest Hemingway, un pescador veterano del mar, Santiago, luego de meses de mala fortuna, logra, finalmente, enfrentarse a su tan elusivo pez gordo. No arruinaremos el final de la historia pero lo que es importante saber es que, en ella, Hemingway nos relata los altibajos de las relaciones de Santiago, con su discípulo, con el mar, con el gran pez e, inexorablemente, consigo mismo.

Se pueden trazar muchas similitudes entre la historia de Santiago y el camino que tuvo que recorrer Nick Nurse antes de llegar a ser head coach de una franquicia de la NBA. Y son algunas de estas similitudes que queremos poner en evidencia, usando citas trascendentes de la obra que le valió a Hemingway un Premio Pulitzer en el año 1953.

“TAL VEZ YO NO DEBIERA SER PESCADOR –PENSÓ–. PERO PARA ESO HE NACIDO.”

Cuando ingresó a la Universidad del Norte de Iowa (UNI), Nick Nurse no tenía del todo claro que su futuro lo llevaría a dirigir un equipo de la NBA. No, su futuro se proyectaba más bien entre libros contables y estados financieros. En efecto, si bien el basket le apasionaba, Nurse apuntaba a titularse y ejercer su carrera de contador. Tan es así que al terminar sus 4 años de elegibilidad basketbolística, optó por quedarse un semestre más en la universidad para terminar los 11 créditos académicos que le faltaban para graduarse. Sin embargo, mientras aseguraba su futuro profesional, Nurse no se alejó de su pasión pues tuvo la oportunidad de unirse al cuerpo técnico de la universidad como asistente.

Una vez graduado, empezó a buscar equipo como jugador profesional. Lamentablemente, a pesar de ser un pistolero de aquellos (en 4 años de universidad, logró conectar 170 triples, a razón de un 46.8% de eficiencia), no se le presentaron muchas oportunidades. Valiéndose de su experiencia como asistente en UNI, decidió diversificar su riesgo buscando también puestos de entrenador. La estrategia funcionó, pues lo llamaron de la Liga Británica de Basket (LBB) para hacerse cargo del Derby Storm, como técnico-jugador. Es así que empezó su periplo como entrenador.

Años después, mucho antes de ser ascendido por los Raptors, Nurse supo que sería head coach en la NBA.  Como él mismo lo cuenta: “Lo vengo diciendo hace 5 años, miles de personas me han dicho que seré head coach en la NBA”. Había entendido que la dirección técnica era su llamado real, eso para lo que había nacido.

“YO ELEGÍ IR ALLÍ Y ENCONTRARLO MÁS ALLÁ DE TODA LA GENTE. MÁS ALLÁ DE TODA LA GENTE DEL MUNDO.”

Luego de esa primera experiencia como jugador-entrenador en el Reino-Unido, Nurse regresó a los Estados-Unidos para asumir la dirección técnica de la Universidad Grand View. En ese momento, tenía 23 años de edad y se convertía en el coach universitario más joven del país. Pero su estadía americana solo duró unos 4 años antes de verse atraído nuevamente por la Liga Británica de Basket (LBB). Nurse, pasaría los próximos 10 años en Europa (en Inglaterra y brevemente en Bélgica e Italia), coronándose campeón británico dos veces y llevándose el premio a Mejor Entrenador del Año otras dos veces, en ese período. Su eurotrip lo llevaría por los Birmingham Bullets, Manchester Giants, London Towers y Brighton Bears de la LBB; con un paso fugaz por el Telindus Oostende de Bélgica y la Liga de Verano de Treviso, en Italia. Eventualmente, luego de una década fuera, decidió que era momento de regresar a casa para lograr una mayor exposición de cara a su sueño: ser coach en la NBA.

Nick Nurse tenía claro que su punto de entrada sería la Liga de Desarrollo (D-League en ese momento, G-League en la actualidad). Sin embargo, a pesar de ofrecerse a muchos de los equipos, no logró conseguir oportunidad alguna. Y es en esa coyuntura que su creatividad y tenacidad empezaron a labrarle un camino.

Manejando por la ciudad de Des Moines, capital de su estado natal, Iowa, Nurse notó la presencia de un estadio recién construido. ¿Quizás los huéspedes de ese coloso estarían interesados en un  entrenador? Luego de algunas llamadas, logró comunicarse con el administrador del estadio quien le informó que el único usuario del recinto era un equipo de hockey pero que les encantaría recibir partidos de basket. En ese momento, Nurse decidió forjarse su propio destino y, luego de algunas otras llamadas, logró sentar las bases para que un político del estado fundará el Iowa Energy. Un año después, el equipo debutaba en la D-League con Nick Nurse como entrenador en jefe. Prácticamente, se había creado su propio puesto de trabajo. Después de 4 temporadas exitosas al frente del Energy, dónde logró un campeonato y un premio a Mejor Entrenador, Nurse asumió la dirección técnica del equipo de D-League afiliado a los Houston Rockets, los Rio Grande Valley Vipers. En su segundo año allí, logró obtener otro título más de la D-League, antes de ser contratado como asistente técnico en los Toronto Raptors.

Finalmente, luego de ir “más allá de toda la gente del mundo”, Nick Nurse cumplía su sueño de llegar a la NBA.

“- PERO ¿AHORA SE SIENTE BASTANTE FUERTE COMO PARA UN PEZ REALMENTE GRANDE?”

“- CREO QUE SÍ. Y HAY MUCHOS TRUCOS.”

Muy temprano en su carrera como entrenador, Nurse empezó a hacerse un nombre como un obsesivo de la eficiencia ofensiva. Y es esa obsesión que lo llevó a querer probar, experimentar, buscar nuevas y diferentes maneras de encarar el ajedrez que se juega en la cancha de basket. Con los Rio Grande Valley Vipers terminó de cuajar los fundamentos de su propio estilo de juego. Si le preguntan, él diría que es una mezcla de la ofensiva triangular de los Bulls de Phil Jackson con el “Seven Seconds or Less” de los Suns de Mike D´Antoni. La premisa consiste en buscar los disparos más eficientes posibles, reduciendo de esta manera los tiros de media distancia en pos de triples y bandejas. Pero Nurse tiene claro que la suya no puede ser una filosofía estática. Para él, es crítico saber gestionar el cambio pues el deporte, tal y como lo conocemos en la actualidad, está sufriendo una evolución acelerada y la única manera de explotar las ineficiencias del juego es probando cosas nuevas constantemente. Su actitud siempre será la de buscar nuevos enfoques.

Nick Nurse es un hombre de muchos trucos pero ¿quizás esté guardando su mejor truco para cuando enfrente a su “gran pez” en las Finales de la NBA?

“PERO HE MATADO A ESTE PEZ QUE ES MI HERMANO Y AHORA TENGO QUE TERMINAR LA FAENA.”

En estos días, la relación entre Dwane Casey y Nick Nurse es prácticamente inexistente. Imagínense contratar a un asistente, darle su primera oportunidad en la NBA, brindarle la oportunidad de acercarse a su sueño, permitirle aprender, crecer, darle su lugar, empoderarlo. Imagínense tomar las riendas de una franquicia luego de una de las peores temporadas de su historia, ir construyendo un equipo consistentemente competitivo, ir cultivando una cultura ganadora, ir aumentando, cada año, las victorias del equipo hasta llegar a la mejor temporada regular en la historia de la franquicia con 59 victorias. Ahora imagínense que gracias a ese esfuerzo son elegidos como el Mejor Entrenador del Año pero que unos días antes de recibir dicho premio son despedidos y que quien los reemplaza es ese mismo asistente que los acompañó a lo largo de este crecimiento. Bajo esas circunstancias, cualquier se sentiría traicionado.

Este cambio probablemente se venía gestando desde hacía algún tiempo atrás. Acá las palabras de Masai Ujiri, Gerente General de los Raptors, hace un año: “Somos muy predecibles. Sentimos que tenemos que ir en otra dirección. No sé cuál. Quizás será la próxima tendencia ganadora de la liga. Estamos intentando pensar progresivamente y no solo seguir dribleando dribleando y dribleando.”

Con todo lo que sabemos de Nick Nurse ahora, es como si Ujiri lo estuviese describiendo a él. Por otro lado, Nurse abogaba por un espectro de tiro bastante estricto y la única excepción a la regla era DeMar DeRozan por lo que, en retrospectiva, quizás tampoco resulte tan sorprendente su traspaso a los Spurs.

Ahora, Nurse tiene el control total del equipo, con un plantel construido específicamente para su estilo de juego. Lo único que le queda ahora es terminar la faena.

David Thornberry:
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