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Channing Frye, rumbo a Orlando: Historia de una superación
El jugador regresó esta temporada a las canchas tras superar sus problemas de corazón, que lo tuvieron un año en el dique seco.
Los Orlando Magic han atacado a su primer agente libre de relevancia. Tras firmar a Ben Gordon por una abultada cifra, ahora se han hecho con los servicios del ala-pívot Channing Frye a razón de 8 millones al año durante las siguientes 4 temporadas. Frye, ala-pívot de 31 años, viene de hacer una de sus mejores temporadas siendo uno de los jugadores más veteranos de los sorprendentes Suns, promediando 11 puntos y 5 rebotes por partido… y todo ello después de que 2013 fuera sin lugar a dudas el año más duro de toda su carrera.
En septiembre de 2012, en un reconocimiento rutinario, los Suns detectaron algo extraño en el corazón de Frye. Un extraño virus que aún no se ha logrado aclarar hacía que su corazón creciera de forma desproporcionada, poniendo en riesgo su salud en caso de que practicara deporte a nivel profesional. Con este serio aviso, los Suns decidieron apartarlo de la disciplina durante toda la temporada, hasta que prácticamente un año después, a comienzos de la pasada campaña, los médicos le dieran el visto bueno.
Así, Frye se recuperó justo a tiempo para formar parte de los mejores Suns en años -aunque finalmente no consiguieran acceder a PlayOffs- siendo titular en los 82 partidos de liga, algo que nunca había conseguido en su carrera desde que fuera drafteado por los Knicks en 2005.
El caso de Frye, con una marcada dolencia cardiaca, es solo uno de los muchos que ha registrado la NBA en los últimos años. Los últimos de ellos fueron Chuck Hayes y Jeff Green. El primero acababa de firmar un contrato de 21 millones de dólares por cuatro campañas con los Kings y el primer día de pretemporada le detectaron que tenía problemas de corazón, aunque acabó jugando tras un exhaustivo reconocimiento, y Jeff Green tuvo que someterse a una operación para subsanar un aneurisma en la aorta que finalmente le permitió reincorporarse a la disciplina Celtic.
Los Magic atan así a un jugador que parece hecho, y que será un foco de referencia en un vestuario tan joven. Está por ver si sus números y sus buenos resultados la pasada campaña justifican un contrato por razón de 8 millones de dólares, aunque, como ha demostrado Frye en varias ocasiones, lo suyo son los desafíos.
