La estrella y máximo anotador de Los Angeles Clippers Blake Griffin ha sido declarado baja por un tiempo idefinido debido a una infección de estafilococos en su codo. La enfermedad requerirá cirugía y su entrenador Doc Rivers ha declarado desconocer cuándo podrá volver, aunque algunas voces del sector apuestan por un retorno cercano a un mes.
Griffin ha sido el jugador más destacado de la franquicia de Steve Ballmer, la más de moda en la urbe de Los Ángeles. Sus números son tan variados como espectaculares. El ala-pívot promedia 22.5 puntos, 7.5 rebotes y 5.4 asistencias (máximo de su carrera), con un espectacular 38% desde la línea de tres; manteniéndose en la lucha por el MVP a final de temporada.
Será complicado saber cómo se adaptará el equipo a la baja de su jugador franquicia, que se mantienen sexto con un balance de 33-18. Mucho se les deben complicar las cosas a Lob City para bajar del carro de los PlayOffs, ya que se mantienen a seis victorias del noveno: los New Orleans Pelicans.
Chris Paul podría tomar la batuta anotadora del equipo, aunque sus problemas físicos durante la temporada no harían recomendable forzarle con vistas a que llegue fresco a final de temporada.
Jamaal Crawford puede ser otra opción, aunque los registros del escolta se han reducido notablemente en la última temporada. Lo que queda claro es que DeAndre Jordan asumirá más reponsabilidad en la faceta ofensiva. El rocoso pívot se repartirá la rotación en la pintura con Glen Davis y Spencer Hawes. Además, es posible que el veterano turco Hedo Turkoglu goce de más minutos en la posición de cuatro.
A pesar de perderse toda su primera temporada debido a un destrozo literal de su rodilla durante una práctica, la salud de Griffin ha sido de auténtico oro desde entonces, perdiéndose solo cuatro partidos desde que comenzó su carrera como profesional (dato CBS Sports). Aún así ha tenido que bregar con una dolorosa bursitis en el hombro durante gran parte de su carrera.
Una baja notable para el All-Star Nueva York 2015
El equipo del Oeste pierde a uno de sus baluartes más notables para la nueva edición del All-Star que tendrá lugar el próximo fin de semana en la Gran Manzana. El dolido Damian Lillard ha sido llamado para sustituirle, aunque tras prometer que nunca jugaría el All Star todo podría estar en el aire.
Es la segunda baja notable del All-Star junto a Kobe Bryant y al malogrado Paul George. La siguiente podría ser ‘La Ceja’ aka Anthony Davis, que se retiró con molestias el pasado sábado.