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Tanking sin tapujos: Los 76ers llegan a las 20 derrotas seguidas
Las 20 derrotas consecutivas hacen que los Sixers alcancen la peor racha negativa de la historia de la franquicia, cosechada en plena época post Chamberlain.
Hacia abajo y sin ninguna motivación para cambiar la tendencia. Los Philadelphia 76ers encajaron este viernes su vigésima derrota consecutiva a manos de unos Grizzlies que cada vez se muestran más fuertes (103-77). Los aficionados que hace apenas una semana despidieron a Allen Iverson en el Wells Fargo Center se han acostumbrado ya a la rutina del que no quiere ganar. Los Sixers llevan sin lograr una victoria desde finales de enero, cuando vencieron a Boston Celtics. Después llegaría el trade de Evan Turner y comenzaría el descalabro.
Las 20 derrotas consecutivas hacen que los Sixers alcancen la peor racha negativa de la historia de la franquicia, cosechada en plena época post Chamberlain en la temporada 72/73. Ahora, a fuerza de buscar objetivos, al equipo de la Ciudad del Amor Fraterno solo le queda el horizonte de intentar no superar la peor racha absoluta de la liga, ‘honor’ logrado por los Cavs en 2011 cuando enlazaron 26 resultados negativos de seguido.
Las malas intenciones de los Sixers parecían evidentes desde el principio de la temporada. Un equipo que traspasaba a su mejor jugador (Jrue Holiday) a cambio de un rookie lesionado para toda la temporada (Nerlens Noel) parecía el paradigma idóneo del llamado ‘Tanking’: dejarse perder para obtener mejores posiciones en el Draft. Sin embargo, un 3-0 de inicio con un Carter-Williams de escándalo venciendo incluso a Miami hacía que muchos nos tuvieramos que tragar nuestras palabras. En la NBA todo es posible, repetíamos. Pero no. Los Sixers van lanzados hacia la peor racha de la historia y lo hacen sin tapujos. La NBA, por muy alabada que sea, también es esto.
Bucks-Sixers, peleando por ser el peor
En idéntica situación y casi de forma más esperpéntica están los Milwaukee Bucks. Últimos en el Este y con la peor marca de la liga, el equipo de Larry Drew no parecía estar predispuesto a comienzos de temporada para estas latitudes. Sin Jennings ni Ellis, sí, pero con Brandon Knight, OJ Mayo, un Ilyasova recién renovado y un Sanders que venía de ser encumbrado como uno de los mejores defensores interiores de la NBA. Podían jugar rápido y soprender. Parecían hechos para el Run&Gun tan popular hace solo 4 temporadas, pero alguien no ha querido apostar fuerte en Milwaukee.
Que Larry Drew siga estando al frente de los ciervos incluso tras los últimos revolcones indica que la actual situación del equipo del estado de Wisconsin responde a un plan superior. Idea que quedó en pelotas especialmente en el partido que esta semana disputaron contra los decadentes pero siempre aguerridos Hawks. Con el partido por decidirse, la defensa del perímetro de los Bucks desapareció para dejar a Kyle Korver exhibirse. Resultado, 12 puntos decisivos y victoria para Atlanta por 97-102. Los Sixers apretaban con sus 20 derrotas, la última plaza del Este estaba en juego y claro, no era plan. También se puede ganar perdiendo.